jueves, 28 de septiembre de 2017

DEMASIADO LEJOS DE TROYA



Ayer anduve un rato tras la VI epístola de Horacio –nihil admirari– en la parte de mi biblioteca ocupada por los clásicos griegos y latinos, comparando varias traducciones. Al terminar, el azar me llevó a tomar de su estante un viejo y querido volumen que poseo desde hace medio siglo: Figuras y situaciones de la Eneida. Tengo devoción por ese libro, y su excelencia es una de las razones. La otra es que con él empecé a traducir a Virgilio a los dieciséis años; y en sus páginas, marcados a bolígrafo los hexámetros para diferenciar dáctilos y espondeos, figura mi propia traducción de cada verso: «Canto a las proezas y al hombre que de las costas de Troya / vino el primero a Italia y a la costa de Lavinia fugitivo del hado…».
Me senté a hojearlo, mientras recordaba, y luego lo devolví a su lugar con una sonrisa melancólica. Pensaba en don Antonio Gil, el profesor sabio y paciente que me guió por esos versos; y en Gloria, la profesora de Griego de bellas grebas que se casó –como era de esperar– con el profesor de gimnasia; y en José Luis Vallejo, el hermano marista con quien, en 2º de bachillerato, traduje mis primeras palabras de latín clásico: «Gallia est omnis divisa in partes tres». Y pensaba en mi amigo el profesor Arístides Mínguez, que en el colegio donde ahora se gana la vida suma veintiséis años peleando junto a las negras naves, cubierto del polvo de los héroes, intentando enseñar Cultura Clásica a chicos de quince años; y este curso no ha podido hacerlo porque, de un millar de alumnos inscritos en su instituto, sólo una docena había elegido esa asignatura, que carece de la utilidad inmediata de, por ejemplo, la informática o la lengua autonómica de turno. Y eso significa que una promoción entera de estudiantes, en ese colegio y en otros centenares de toda España, acabará la enseñanza secundaria sin tener ni remota idea de quiénes fueron Homero o Virgilio, sin saber lo que nuestro mundo debe a Solón, Clístenes o Pericles, sin recordar a Sócrates o buscar el camino a casa con Jenofonte, sin comprender las importantes consecuencias de la guerra por Hispania que enfrentó a Escipión y Aníbal. O sin poder, jamás, disfrutar de la belleza, la felicidad, de una frase tan perfecta y absoluta como «Nox atra cava circumvolat umbra».
El desinterés, cuando no la ignorancia criminal de los responsables de la educación en España en los últimos veinte o treinta años, no ha hecho sino ahondar el daño. En una sociedad resuelta a suicidarse culturalmente, como la nuestra, a los chicos brillantes se les aconseja estudiar sólo bachilleratos científicos o de ciencias sociales; a los torpes, humanidades; y a los zopencos, ciclos formativos. Tal es el triste mapa de nuestro futuro. Y en ese afán disparatado de borrar de las aulas todo lo inútil, las malnacidas leyes y reformas educativas del Pesoe y del Pepé han conseguido que los alumnos que con 16 años pueden optar por Humanidades –mi generación estudiaba latín básico y obligatorio con 11 o 12–, se encuentren ahí por primera vez con el latín, aunque descafeinado y de una simpleza aterradora. Pero esa opción, además, compite con otras socialmente mejor vistas: la científico-tecnológica y la profesional, de modo que sus posibilidades son mínimas.
Por no hablar del griego, claro. En algunas comunidades –que ésa es otra, cada cual a su aire–, en 1º de bachillerato puede elegirse, es cierto, entre Griego y Literatura Universal. Pero los chicos no son tontos, y saben que el griego es difícil y endurecerá la selectividad. Así que adiós para siempre a Homero y compañía. Decenas de profesores al paro, u obligados a impartir materias afines de las que no tienen ni zorra idea. Y lo que es peor: generaciones de jóvenes ciudadanos a los que se arrebata el derecho a una educación integral; echados al mundo sin saber, y sin importarles un carajo, quiénes fueron Arquímedes, Séneca o Catilina, ni lo que de verdad y en origen significan palabras como agonía, democracia o isonomía.
No olvido que la primera vez que vi arder una ciudad, Nicosia en 1974, con veintidós años, llevaba en la memoria –y en la mochila, aunque eso fue casual– el canto II de la Eneida. Y en los griegos armados que se despedían de sus familias reconocí sin dificultad a Héctor, el del tremolante casco. Y es que de eso se trata, a fin de cuentas. Sin el latín, sin el griego, sin aquellos profesores que me guiaron por ellos, nunca habría podido comprender Troya y cuanto hoy significa y esclarece. Me habría perdido entre los dardos aqueos, en la negra y cóncava noche, sin encontrar nunca el camino de Ítaca o de las costas de Italia. Sin la forma de mirar el mundo con la que hoy vivo, envejezco y escribo.
ES LA CRUEL Y TRISTE REALIDAD, PERO NADIE PUEDE EXPRESAR MEJOR ESTE DESPROPÓSITO QUE MI PAISANO, CON EL QUE, ADEMÁS, COMPARTÍ PROFESORES DE LATÍN Y GRIEGO  -BASTANTES AÑOS MÁS TARDE, ESO SÍ -   ¡SIMPLEMENTE GENIAL ! 

REFERENTES CLÁSICOS EN MIGUEL HERNÁNDEZ

Resultado de imagen

Con los alumnos de 1º de Bachillerato hemos trabajado los referentes clásicos en Miguel Hernández , buscando dioses, personajes mitológicos y cualquier referencia del mundo clásico, especialmente en su primera etapa, los alumnos se han encargado de buscar una imagen, ya fuera una pintura o escultura en la que apareciera el personaje mitológico aludido y han buscado la definición e historias en las que aparecen dichos personajes, y, con todo este material, hemos confeccionado un gran mural que colocamos en la entrada de la Biblioteca del Centro. 
El resultado ha sido especialmente satisfactorio, porque este año se conmemora el 75 aniversario de la muerte del gran poeta oriolano.






martes, 21 de febrero de 2017

AMORIS DIES


El Día de los enamorados aprovechamos para leer historias de grandes amores clásicos como Hero y Leandro, Píramo y Tisbe y algunos poemas de Catulo. Los alumnos de 4º de Latín realizaron la lectura en la Biblioteca del Centro y escribieron poemas de amor en latín, así como frases de amor también en latín con las que decoramos la Biblioteca.

ALBERTO Y AROA
ARACELI
YOLANDA
ALBERTO LEYENDO A CATULO




Los alumnos de tercero de Cultura Clásica también decoraron el aula y leyeron poemas de amor de Safo de Lesbos y Catulo.

Aquí dejamos estos poemas para que los podáis escuchar.




 Aquí podéis ver un vídeo sobre el trabajo de Cupido


FELIX AMORIS DIES!!!
amor

jueves, 16 de febrero de 2017

EL MISTERIOSO CASO DE LA NECRÓPOLIS

El 10 de febrero los alumnos de 1º de Bachillerato realizaron un taller sobre el mundo funerario en la Antigüedad  en el Museo Arqueológico. Primero vieron los distintos tipos de enterramientos a lo largo de la historia hasta llegar a la etapa romana

Es un lujo poder contar con un museo ubicado sobre una necrópolis tardorromana (S. IV d. C.),  en la que, además, pudimos ver los huesos de un muerto real de aquella época, ya que los trabajos de limpieza y restauración han dejado al descubierto un fémur.


Los alumnos realizaron, tras la explicación, unos cuadernillos sobre diferentes aspectos del mundo funerario.

Después recorrimos el Museo, deteniéndonos en elementos relacionados con el mundo funerario como ánforas de enterramiento,  ajuares y urnas funerarias y , por supuesto, en la riquísima colección de epigrafía funeraria que se expone en el Museo
ajuar funerario


urna funeraria



ánfora funeraria


Finalmente, los alumnos se convirtieron en detectives para resolver un asesinato en la necrópolis. Tuvieron que resolver el "misterioso caso de la necrópolis" el nombre del cadáver  y el objeto y lugar donde lo habían asesinado. El equipo ganador recibió un diploma que los acreditaba como "detectives de la historia". Enhorabuena María Solano, María Espín, María del Mar Fructuoso y Daniel Bamio.
Fue un taller ameno y que despertó mucha curiosidad en los alumnos.
alumnos con una maqueta del teatro romano

PACIS DIES

El 30 de enero celebramos el Día de la Paz, los alumnos de Cultura Clásica estuvieron muy interesados en el tema de la guerra en la Antigüedad. Se realizó un debate sobre cómo sería un mundo sin guerras, la necesidad o no del ejército,...

  Acabamos decorando la clase con frases en latín sobre la paz.

JULIO CÉSAR



El Día de Sto. Tomás de Aquino realizamos el IV concurso de Julio César para elegir al César del Mediterráneo de 2017 . se presentaron 6 alumnos, entre los que hubo algún valiente de ciencias. Este año hubo un gran nivel y el concurso se alargó más que otros años porque los alumnos se las sabían casi todas, finalmente y, aunque estuvo muy reñido, ganó María Espín López, alumna de 1º de Bachillerato, que repitió, ya que ganó también el curso pasado.
¡Enhorabuena María!







FELIX SATURNALIA!

En Navidad celebramos las Saturnalia romanas, los alumnos se sorprendieron de saber que ya los romanos celebraban el fin de la cosecha en estas fechas con muchos elementos que seguimos manteniendo en la actualidad: las familias se reunían para comer juntas, se honraba al dios Saturno por las cosechas que se acababan de recoger; se gastaban bromas ( como el día de los inocentes); se hacían regalos, los niños recibían muñecos de barro y otros juguetes y los adultos se regalaban saquitos de nueces y velas ( como en la actualidad con Papa Nöel y los reyes Magos); se jugaba a juegos de azar y lotería (como la lotería de Navidad); se comían dulces y un pastel con un haba seca en su interior y el que la encontraba se coronaba ( como nuestro roscón de reyes). 
Los alumnos realizaron tarjetas de felicitación en Latín y Griego y participaron en un concurso en el que hubo un ganador y cinco  segundos premios.





















 El día de actividades participamos en los villancicos cantando el "Adeste fideles" en latín